Según el rector, "nos encontramos en un momento magnífico para abrirnos a otras culturas y otras maneras de entender el universo. El proceso de convergencia de Bolonia permite que podamos ofertar nuestras titulaciones a cualquier ente, ser, ectoplasma o simplemente colgado sideral que quiera pasarse por aquí y matricularse. Por eso hemos puesto en marcha un innovador programa de intercambio de alumnos con cualquier civilización que nos los acepte, en plan Erasmus pero a lo grande, que para eso somos vascos. Lo denominaremos Kosmus Magnificus y su primer paso consiste en la creación de un punto físico al cual los estudiantes de procedimiento astral puedan acudir para informarse con toda precisión y evitar nuestra página web, bastante sosita la verdad. Además de estampitas de nuestros equipos de fútbol y pelotaris más representativos, el centro cuenta con instalaciones como tres jacuzzis, salón de masaje, vinoteca, salón de billar, solárium y sala de cine 3-D".
A la pregunta de cómo se va a publicitar este centro a los posibles interesados de más allá de la galaxia, el rector ha asegurado que "ellos ya saben dónde estamos, y la prueba es que no ha habido noticias de avistamientos en Euskadi desde hace varios años, señal de que ya nos conocen. Ahora es el momento de ofrecer nuestros servicios en estas magníficas instalaciones. Y si no vienen, ya nos encargaremos nosotros de aprovecharlas, que para eso estamos, para sacrificarnos".
A continuación, y mientras el rector realizaba una performance de teatro kabuki representando la convergencia de civilizaciones galácticas usando dos palillos, un ukelele y una botella de sake, su cuñado, a la sazón responsable de la ejecución de la obra, declaraba que "nos ha salido un adefesio, es verdad, pero por lo menos ha resultado caro de narices, y eso también cuenta, ¿no?".
